saliendo de la iglesia, recién casado.
mi primo me saluda antes de cruzar el arco de entrada.
mi primo chico.
ese orgullo en nuestros ojos, entre nosotros.
perdió el control del auto.
y perdió la vida.
"un accidente... le pasa a cualquiera".
un accidente no le pasa a cualquiera.
el nombre de mi primo era Rodrigo.
Y no perdió el control de su vida:
era un joven con la energía del sol
y el poder de mil vientos:
donde entraba era ver entrar a un ejército de sonrisas.
un batallón de sorpresas.
una guerra bendita y ausente de fatalidades.
era un hermoso General al que le confiabas tu vida.
me dijo una tarde, sentados en el nuevo sofá de mis padres donde esta noche dormiré, "Quiero cambiar, rescatar los años que dejé atrás, quiero vivir como siempre quise vivir: amar a una mujer, tener una casa, trabajar tranquilo, rodearme de hijos".
mi primo, mi hermano menor, aquel hombre honesto y bondadoso, sensible a las fallas del mundo y de la gente, se negaba a entregar el dominio de su espíritu a los eventos pasados de su historia.
no quería ser recordado por carretero, despilfarrador, borracho o carnivalesco.
quería ser recordado por buenas acciones; por logros y no torpezas; por entregar amor y no cierto egoísmo narcisista.
me dijo:
"Tú me entiendes como me entendía tu hermano, sé que contigo puedo salir adelante".
le hice una promesa:
no te perderé como perdí a mi hermano.
estaré contigo siempre.
pero antes de ayer, durante la madrugada, ¿dónde estaba yo, Rodrigo querido?
no pude salvarte.
"...fue un accidente".
el mundo te merecía y aún te merece.
en la lista de personas que valen más que el aire mismo, ibas en los 10 apuntando al primero.
cuánto me duele dejar la promesa inconclusa, como quién olvida un cuadro.
cuántas lágrimas por ti, mi primo.
cuánta pena.
ya nos veremos en el fin del mundo.
y estarás tú.
y mi hermano.
qué alegría verlos.
y entender finalmente...
un abrazo,
M.
5 comentarios:
mat,
eres c a d a s e g u n d o
un hombre mas valioso.
abrazo fuerte,
mat.
Putz... nada que decir.
Un abrazo enorme y a levantarse no más después del llanto que para eso nos quedamos.
Matias, las pérdidas de nuestros amores son lo más triste que puede pasar, pero tu sigues en vida y debes seguir haciendo cosas por los que quedan...y por quienes te miran de lejos y te siguen amando.
un beso y mucha fuerza.
si lo piensas, hay muchos que uno no ve hace mucho tiempo, meses, hasta años y los llevas tan presentes en ti, como si los vieras todos los días.
y aunque no los vuelvas a ver...si lo piensas, todo está en uno. Ellos, ellas, están en uno.
Todos. Uno. Siempre.
:)
Puta Corner, que decirle Colega.
A veces uno siente que llueve sobre mojado, peor si tienes algo sembrado cuando salga el sol seguro hay cosecha.
Mantenga la fé en alto y preocúpese de los que siguen acá investigando de que se trata todo esto.
Fuerza, que como siempre, la va a necesitar para sacar al topo de la madriguera.
Un abrazo
SUERTE
EDO
Publicar un comentario