lunes, agosto 22, 2005

Escuchando: Farewell, de Umebayashi/Shigeru. Casa de las Dagas Voladoras.

Ayer, lo mismo. Nuevamente Falabella. Venía un inserto, un libro mejor empastado que las nuevas ediciones de La Biblia, el sábado. En él, muebles y cachibaches para la casa. Pero with my woman fijamos la pupila en una sola cosa. Una sola. Y ayer temprano fuimos a Falabella Parque Arauco en busca de "esa única cosa".
El Parque Arauco, ¿viste?, es grande, majestuoso, y vieras las remodelaciones que le están haciendo, querido, pero si ya parece del siglo XXIII...
Ayer, lo mismo y se va a repetir por siempre yo creo con Falabella. Ya tuvimos malos ratos teniendo nuestra lista en esa tienda: RECOMIENDO, A QUIENES QUIERAN CASARSE, A QUIENES QUIERAN TENER LISTA DE NOVIOS, COMPARAR LAS CASAS COMERCIALES, porque Falabella...
Le pregunto a un vendedor que qué onda, dónde está "la cosa" que vimos en el inserto del sábado para poder comprarla. El vendedor nos manda fuera del Parque Arauco, al Falabella que está encima del Homecenter.
Ayer, lo mismo. Una vez en el otro lugar, otro vendedor buscó "la cosa" en el inserto, introdujo el código en la computadora, nos miró y dijo:
-Es que ustedes tendrían que haber llamado primero, porque no siempre están "las cosas", por ejemplo, lo que ustedes buscan la pantalla me muestra que está en Copiapó y Falabella Tobalaba, pero igual está marcado con un -1, lo que significa que tampoco es seguro que esté, es que ustedes deberían llamar primero...
Llamar primero. Debíamos llamar primero.
Al SERNAC voy a llamar por publicar Falabella "cosas" que en la realidad no existen en sus tiendas...

1 comentario:

M dijo...

Muerte a las multitiendas!!!!!! Organicemos cientos de crímenes ferpectos!

PD: se recomienda la revisión referencial de Crímen Ferpecto, de Alex de la Iglesia.