domingo, febrero 06, 2005

Cuento Breve: Dantesco.

En un ascensor encontramos a una hermosa mujer rubia, voluptuosa y atractiva, vestida con un traje de dos piezas rosado. La acompaña un gordo de gruesos lentes, pelo grasoso, terno azul ajustado, dos lápices en el bolsillo superior de la chaqueta, maletín negro, frente sudada. Ella va atenta a los números que indican el descenso al primer piso. Él, en cambio, va mirando de reojo la figura de la mujer. La mujer sabe que el gordo la espía y esto la incomoda. Una sonrisa asombra en el rechoncho rostro del gordo.
El gordo comienza a imaginar.
Él y la mujer (y todo pensado en lentos movimientos) corren de la mano por un pasillo. Ella sonríe y el gordo salta de felicidad. Irrumpen en una pieza de motel. Excitados tratan de quitarse la ropa. Él la empuja sobre la cama. Ella cae gozosa. El gordo se saca la chaqueta, se quita la corbata, y abre la camisa. Ella estira los brazos llamando al gordo. Dando lo que parece ser un grito animalesco, el gordo salta a la cama desesperado, mientras la mujer abre despacio los ojos y la boca, aterrada ahora por la imagen del gordo cayéndole encima.
La mujer sorprende al gordo mirándola fijamente con una descarada sonrisa lujuriosa. El gordo repara en que la mujer lo observa y con un movimiento torpe de la cabeza simula mirar los números en la pantallita. Carraspea y se arregla la corbata. Ella le da la espalda al gordo y hace un gesto de “que gordo tan raro y patudo”.
La mujer tiene un breve pensamiento.
El gordo vestido con unos pantalones cortos amarillos, una polera ajustada, un gorro con orejeras ruso y un gran girasol, da saltos como un idiota por un pastizal, con la misma sonrisa. Al igual que el sueño del gordo, todo en lentos movimientos.
La mujer se tapa la boca para no reírse. El gordo detecta que la mujer se está mofando de él. Frunce el ceño, ofendido. Las puertas se abren, la mujer sale y el gordo se queda en el ascensor. Ella lo mira y con la mano le manda un beso. Las puertas se cierran. El gordo queda en silencio un instante. Luego se apoya en la pared y se larga a llorar.

No hay comentarios.: