sábado, mayo 01, 2010

De repente, pensando.

Somos ángeles y demonios.

Somos capaces de recoger con pinzas el más diminuto grano de arena perdido en una extensa playa y podemos también liberar una bomba nuclear de gran tamaño sin delicadeza alguna sobre un área poblada por quienes suponemos son enemigos.

Somos padres, hijos, hermanos, abuelos, somos hombres, pero hemos escrito la historia con sangre y balas en el pecho del otro y cortando cabezas porque simplemente un hombre supone ostenta el poder para hacerlo.

Somos valientes ante ciertas catástrofes, incluso solidarios.
Somos cobardes, huidizos, cuando se trata de hecatombes que afectan a partes del mundo que no conocemos.

Somos concientes de todo esto.
Somos portadores del bien y del mal en nuestro código genético.

Somos religiosos.
Somos asesinos.

Somos lo que somos y podemos vivir con ello.

No hay comentarios.: