miércoles, marzo 31, 2010

¡Oh, Títis, dime la verdad!

Sufro de Otitis. No permanente. desde ayer hasta el domingo. Un estimado. Con probabilidades de mejorar al viernes.

El asunto es que con Otitis juraría haber escuchado las cosas más fascinantes e increíbles desde el mismísimo más profundo silencio.

Enfermarse, de tanto en tanto, y delirar entre fiebres y medicamentos, trae de tanto en tanto también como vacuna el misterio de la sanidad mental.

1 comentario:

Mariana dijo...

... y mañana él será un poco más mayor, un poco más alto y un poco más inteligente (más todavía?). Se hará nuevas promesas tales como: more water less coffee, tea and beer, to learn the guitar, to not five up on any of these if there are a few setbacks along the way, to be the best husband!!

En cualquier caso, la vida sigue.... Carpe diem!!