Mujer
Por hoy me voy a permitir ser sencillo en las palabras
Honesto y cercano a lo vulgar
Será el zumbido de la muerte durante mis sueños
Anoche
Anoche que de todas formas me levanté
Abrí la ventana y me fumé un cigarrillo
Hablando con no sé quién
Con no sé cuántos
Esos ojos que brillan y se agolpan en decir algo
Diciendo nada
Nada se les entiende
Pero ahí te quedas intentando escucharles
Por ese maravilloso brillo en los ojos
Hasta que el cigarrillo se acaba
La brisa profunda de la luna misma
Te lo arranca
Y te encoges y te abrazas y recuerdas
Que en la cama duerme una tibieza
De perfumes naturales
Entonces cierras la ventana
Te quedas de pie observando la figura
Que resalta entre las sábanas
Y tarde en la noche
Esa noche y a esa hora
Quisieras recorrer la geografía que contemplas
Beso a beso
Hasta conocer cada detalle
Comenzando por el cuello
Navegando luego por el plácido océano
De su espalda
Superar con maestría el horizonte
De ambas caderas
Para descansar en el firme estómago
Y mantener el ancla de un largo beso
En su ombligo…
Delicioso sería despertar cada mañana
Con su espalda como ventanal al mundo
Iniciando la travesía rutinaria
Fuera de toda monotonía:
Siempre
Beso a beso.
1 comentario:
esta bueno este. las espaldas son algo extremadamente significativo. son verdaderos ventanales.
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