jueves, julio 19, 2007

S O U T E R.

Todos aquí que pongan atención

No voy a hablar dos veces

Se cansa el músculo del corazón

Se evocan ciegas sombras al decir los nombres

De los guerreros que lucharon

Pero con dioses o sin dioses de todas formas murieron

Llovía y entre la lluvia caía escondida la muerte

Pero Ghost Dog te enseña que un samurai camina bajo la lluvia

No corre tratando de protegerse

Porque corras o camines, te mojas igual

Es cierto

Y lo comparto con ustedes

Mi hermano mayor, un genio sin remedio

Una madrugada llenó su estómago

De suficientes remedios para quedar muerto


Respeto su decisión

Si sufría viviendo

Yo no sé donde fue a parar

Yo sólo vi a mi hermano mayor

Y después a mi primo menor

Bajar lentamente encerrados en ataúdes

Al fondo, al abismo, a la húmeda tierra

pero nunca al olvido

abrí como una fruta mi corazón

y la sangre entró a las raíces

¿Quien dice que los muertos no viven?

Ayer rodearon de esqueletos

Mi agitada mente


No me preguntes qué es la muerte

No lo sé

Malditos esqueletos

¿Vas aprendiendo algo?

¿O estás igual de sordo que todos los demás?


No me preguntes qué es la muerte

No lo sé

Malditos esqueletos


¿Vas aprendiendo algo?

¿O estás igual de sordo que todos los demás?

1 comentario:

María José Fuentes dijo...

Me recordaste algo que escribí.

Los caballos de fuerza viven en mi estómago y tiran a parir. Las bestias tienen alas y ventilan los secretos que aún quedan para asegurar, en alguna fisura cardíaca, que todavía destila y que destila espeso.

Destila espeso.

Silencio.