Dos castores cascarrabias almorzando con sus loncheras mientras esperan que el río suba un poco.

-Mira, no importa que nos estén mandando menos madera para armar la represa, eso a los patichuecos de los cisnes les importa un santo piñedo.
-Ok, pero llevamos más días de los acordados y no se pronuncian en pagarnos más por el tiempo que nos hemos demorado en hacer los arreglos de último minuto que se les viene ocurriendo...

(el castor cascarrabia mayor deja su loncherita sobre una tortuga.)

-Mira... Ellos nos contratan, ¿cierto? A los cisnes, te repito, les importa una reverenda ardilla si te cortas una pata. Ellos quieren lo que nos pidieron. No importa cómo. ¿Por qué? Porque ellos no pierden nada y simplemente llaman a otro par de castores.
-Pero cuando cerramos el trato con el cisne creativo fijamos un timing de entrega y resulta que han pedido tantos cambios a la represa que ya no hemos ganado nada con esta pega, de hecho, lo que hay en mi lonchera es lo que me queda para el resto del invierno. Deberían respetar los acuerdos, mira que me esperan mis castorcitos, les prometí que los llevaría a ver cómo los topos se azotaban contra las piedras cuando no se ponen lentes...

(la tortuga, aunque lenta, se aleja con la lonchera del castor mayor)

-Tú, trabaja, porque si no, nos vamos a quedar sin pega.
-Ya, pero tampoco se trata de quedarse sin vida.
-¡Por la recresta! ¿Quieres que te dé con un madero en la cabeza para que entiendas la dinámica?
-¿Con qué madero? ¿Uno de esos tres que nos van quedando? Estos cisnes son unos zorros, unos explotadores...
-No trabajes entonces.
-No, no es "no trabajes entonces". Es defender mis intereses de castor, no tengo por qué tratar de hacer milagros para dejarlos tranquilos si son ellos mismos los que se salen del trato y nos cambian los planos de la represa cada tarde. Si no saben lo que quieren, cosa de ellos. Pero nosotros hemos cumplido por sobre lo castoramente posible para complacerlos. ¿Acaso no crees que haya un límite? ¿A qué le tienes miedo?

(La tortuga ha desaparecido con la lonchera del castor mayor.)

-NO LE TENGO MIEDO A NADA.
-¿Entonces por qué seguimos tratando de construir una represa con maderas que no tenemos y que no contempla el contrato de construcción con los cisnes?

(El castor cascarrabia mayor se levanta enfurecido y sale detrás de la tortuga que no se ve por ninguna parte.)