El Hombre nada mantiene. Desarrolla civilizaciones, tecnologías, religiones, campeonatos de fútbol. Y como dicen: Nada es para siempre.
Aquellos fastuosos imperios que nos hacen estudiar en el colegio. Palacios gloriosos, castillos interminables, “fue el conquistador del mundo”. ¿Qué son ahora? Un par de párrafos a aprender para la prueba de historia.
Por supuesto que no se puede desmerecer los logros de los antiguos, la cultura-raíz inculcada, las fronteras que delinearon la ambición de ciertos megalómanos guerreros.
¿Qué aprenderá mi hijo de esta época? ¿Qué Bush fue el Hitler del siglo XXI? ¿O un estadista mal comprendido?
¿De dónde proviene el miedo de vivir en sociedad? ¿De hombres corruptos atraídos por las fuerzas oscuras del Poder? ¿O la imposibilidad humana de anteponer la vida, el respeto y la Paz ante aquellos solitarios Emperadores-Dueños-De-Estrellas-De-La-Muerte?
Cayó Schäfer.
Cayó Pinochet.
Veremos que nos prepara CNN para este primer semestre.
¿Un Dr. No? ¿Un loco de la motosierra?
El Mal vende. El Diablo, si canal propio tuviera, sería señal única.
Dios, en cambio, prefiere la hermana Wendy.
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